sábado, 22 de agosto de 2009

La amiga fea

Si nos fijamos bien, es de sobra conocido que la gran mayoría de las tías buenas, de clase media-alta (sí, esas de quiero y no puedo, las que voy de que soy ultra pija y me voy a navegar con mi papi, pero no llego a fin de mes) suelen tener una amiga fea, da igual que sean dos o cinco, cuatro pueden estar bien, pero siempre está la fea, o al revés, la guapa que va con feas… son todo variaciones del mismo concepto.

Es tan simple como que estos grupos de amigas, faltos de cerebro, no se mueven por los principios por los que se mueve cualquier grupo de amigos/as. Son relaciones superficiales que son fácilmente pasadas por alto cuando aflora un sentimiento muy fuerte y muy arraigado en el sexo femenino: la envidia. Creo que no hacen falta más comentarios al respecto.

Bajo este principio básico un sujeto varón de aspecto “normal” (X) que quiera mantener una relación con una tía buena de uno de estos grupos (Y), así de buenas a primeras se va a comer los mocos. Sin embargo no ha de desfallecer, antes que nada ha de olvidarse de Y, no hacerle ni puto caso e ir a por la tercera en discordia, esa amiga fea (Z). Lo más probable es que Z se sienta en inferioridad ante su(s) amiga(s) de tipo Y, y verá a X un buen partido bastante complicado de conseguir, por lo que X tendrá el terreno llano para conseguir a Z.

X consigue a Z y aquí es cuando empiezan las envidias. De pronto X pasa de ser normal para Y a ser atractivo, a tener algo. Así, Y empieza a preguntarse por qué Z ha tenido a X, y ella, de tipo Y, no. La envidia le corroe allanando el camino a X, este empieza a ser más interesante para Y, y a través de ella a sus amigas de igual condición, a la vez que ponen verde a Z por haberle tenido. Ahora X tiene el camino más fácil para conseguir a Y, (o a alguna de igual estatus) y Z se lo ha pasado doblemente bien, ha tenido su premio y se lo ha restregado a las guapas de sus amigas.

Por lo cual, complejos amigos, si queréis a Y, atacad a Z, si no sale bien la cosa y no conseguís a una Y en especial, tranquilos, se correrá la voz (con los efectos antes descritos) y si no es una es otra, pero siempre estará Z y lo bien que os lo habréis pasado.

K.

4 comentarios:

X dijo...

Yo es que no soy ni X, por paradójico que parezca. Y además no me van las Z porque soy muy exigente.

Que tener novia incrementa el sex-appeal es un clásico irrefutable, dixit sea de paso.

Engreído dijo...

Joder con las X, las Z y las Y, mira que os gustan últimamente.

Al final esto va a ser un blog misógino, nano. Lo mejor es hacerle caso a Y, y cuando se sienta halagada pero vaya a hacerse la superior, pasar de ella. Ya verás cómo se pica. Porque ella lo vale.

X dijo...

¿Hacerle caso? Si es ella la que no te hace caso a ti. xDDD

Gonzalo dijo...

Al final todos gays.